Tarta de queso y pera

 ¿ Cómo definiría yo a esta tarta? ... pues .... diría que es ÍSIMA ... suavísima,  riquísima, facilísma .... más que ideal sobre todo para los "amantes" de las tartas de queso ... sin duda alguna, una receta de las que no nos deben dejar indiferentes .... sólo puedo deciros que os animo a probarla ... estoy segura que os va a encantar!!!!.
Vamos a conseguir un postre de primera categoria sin tener que complicarnos demasiado ... os garantizo que aquí el que más tiempo "trabajará" será nuestro horno .... y después nostr@s a disfrutar!!!!.

INGREDIENTES:

- PARA LA BASE:
                          - 8 sobaos ( los normales, no esos que son pequeños, he calculado y en peso serán unos 300 grs.).
                          - 125 grs de mantequilla en pomada.

- PARA LA MASA:

                          - 4 huevos.
                          - 200 grs de queso fresco.
                          - 200 grs de queso emmental ( puede ser rallado o en lonchas y lo cortamos en trocitos).
                          - 200 grs de queso de huntar.
                          - 200 ml de leche entera.
                          - 200 grs de azúcar.
                          - Pera tipo conferencia ( porque es dulce y tierna), que esté madura ... cantidad unos 300 grs.
                          - 4 o 5 granos de anís (opcional, yo no lo pongo. Son fáciles de encontrar en cualquier supermercado).

Yá tenemos todos los ingredientes, ahora vamos con la elaboración.
Lo primero que haremos será la base de nuestra tarta, para ello en un bol desmigaremos los sobaos y les añadiremos la mantequilla en pomada (en pomada significa que la mantequilla debe de estar blanda para ser mezclada de una forma sencilla. Podemos sacarla con bastante antelación de la nevera para que se ablande a temperatura ambiente o darle unas vueltas en el microondas, pero con cuidado de que no se nos derrita).
Mezclamos ambos ingredientes con las manos (bien limpias, por supuesto).
Yá tendremos preparado nuestro molde con el papel de horno (os lo explico más adelante con foto).
Extendemos la mezcla por toda la base (procurando que nos quede bien nivelado, esto es , que qeude más o menos la misma cantidad de relleno por toda la base).
Vamos precalentando el horno a 180 grados.
En un bol mezclamos el queso fresco, el queso de untar y el queso emmental (la cantidad de la receta original son 200 gramos de cada queso, pero como la tarrina de queso fresco es de 250 gramos, yo lo hecho todo, al igual que ocurre con algunas tarrinas de queso de untar... por incluir 50 gramos más no pasa nada... No cambiaremos el resto de las cantidades. El queso emmental puede ser en cualquera de sus formatos, o bien rallado, lonchas o en un trozo... el rallado es el más cómodo a la hora de batirlo, pero no hay problema por usar los otros dos tipos sólo que deberemos de cortarlo en trozitos antes de batirlo con el resto de los ingredientes).
Un vez batidos los quesos con la batidora añadiremos la leche caliente (no demasiado, nos ayudará a deshacer por completo todos los quesos).
Cuando esté todo bien batido, añadimos los huevos y el azucar. Volvemos a batir hasta que quede todo bien mezclado.
Ahora llega el paso opcional, el añadir o no los granos de anis, si os gusta este sabor podeis incluir unos pocos en vuestra tarta. Con unos pocos, me refiero a unos cuatro o cinco granos...A mí, que no me gusta el sabor de el anis, prefiero no incluirlos, pero que sepáis que es un ingrediente que se puede añadir en la receta, dependiendo de vuestros gustos.
Sólo nos falta incorporarle la pera, la cuál tiene que estar madura y blandita, la cortaremos en trozitos y se la añadiremos a la mezcla, pero sin batirla con la batidora, que se vean flotando en la mezcla.
Volcamos todo sobre la base que teníamos reservada de sobaos y mantequilla.
Llevamos al horno.
Yo la tuve a 180 grados durante 60 minutos... Esto es una orientación, por que como siempre os digo, cada uno es un mundo y trabaja a su ritmo. Sabréis que la tarta está lista cuando esté cuajada del todo. Os cercioraréis de ello cuando le introduzcáis un pincho o brocheta y veáis que sale limpio.
Si veis que se os dora mucho por arriba y todavía está sin hacer, acordaros de el truco de el papel de aluminio, le poneis un trozo por encima y evitarési que la tarta se siga haciendo por la parte de arriba, asi no se os "chamuscará".
Cuando esté lista dejaremos enfriar fuera de el horno.
Si la hacemos de un día para otro mucho mejor, y por supuesto, debemos de conservarla en la nevera bien tapada con papel de aluminio o film transparente.... Por Dios!!! Este paso es imprescindible, no queremos que nuestra tarta tenga sabores "extraños"... Veáse, tarta de queso con sabor a macarrones, chorizo, etc, etc.. Nos cargaríamos la tarta en cero coma.
Nada más, esto ha sido todo, os dejo una gran receta que como poco se merce que os pongáis yá con su elaboración. Yo yá he dado buena cuenta de la que tenía en la nevera, ahora os toca a vosotr@s coger la cuchara.