Biscocho de platano

Hacia ya algún tiempo, que habia oido hablar de esta receta, y siempre, si no era por una cosa era por otra, no me decidia a probarla ... pero bueno, ha llegado el "gran dia" y aquí estoy con el resultado.
No siempre "me fio" de lo que cuenta la gente sobre determinadas recetas, a las pruebas me remito ... ya sabéis que la mecánica de la Escuelina, es hacer la receta, y con la experiencia bien fresquita relatar los pros y los contras .... para que sepáis con que dificultades os podéis encontrar y que resultados vaís a obtener.

Os diré que me ha gustado mucho el resultado .... conseguiremos un bizcocho "diferente", será muy esponjoso y lo que es mejor super super jugoso ... eso si ... antes de hacerla, leí que decia una chica, que se te "inunda" la cocina de un olor a plátano!!!!, cosa que en mi cocina no pasó y os juro y os perjuro que usé "plátanos de Canarias" jejejej, es más, a mi no me gustó nada el olor del plátano caliente y pensé que me habia salido mal.
Nada de eso, me llevé una sorpresa, eso sí, el sabor a plátano brillaba por su ausencia, pero no sé, se compensa con la jugosidad conseguida y estoy contenta del resultado, bueno, es evidente cuando os quiero poner su receta no???.
Además, como ocurre con los cocidos, cuantos más dias pasan, más rico está, aunque ... ¡¡¡ a ver a quien le aguanta muchos dias sin ser comido jejej!!!.

INGREDIENTES:

- 200 grs de azúcar.
- 200 grs de harina de reposteria ( vale la normal, son manías mias!!!).
- 4 huevos.
- 3 plátanos ( mejor que estén maduros, pero no pasados).
- 1 sobre de levadura tipo royal.
- El zumo de medio limón.
- 70 ml de aceite de girasol.( 70 grs).
- Un "pellizco" de sal.

Voy a aprovechar las fotos para explicaros bien cada paso, no sin antes aclarar un par de cosas.
Os preguntaréis que qué pinta el zumo de limón en el bizcocho de plátano, pues, como casi todo en esta vida tiene explicación lógica .... al partir y batir el plátano, éste, tiende a oxidarse, con el limón, evitaremos ese proceso.
Otra cosilla, el harina ha de ser tamizado ( ya sabéis que yo utilizo un colador) y mezclaremos con la levadura.
El pellizco de sal, le podréis añadir cuando os parezca.

Precalentamos el horno a 180 grados y tendremos el bizcocho unos 50 minutos, pero, como siempre os digo, es un tiempo orientativo ya que cada horno va a su ritmo .... eso sí, en los primeros 20-25 minutos ni se os ocurra abrir el horno... porque entonces, el bizcocho bajará.
Pincharemos, ( yo suelo utilizar una brocheta de madera, por lo fina.), si sale limpio estará, si véis que todavia está crudo por dentro y por encima está demasiado tostado podéis poner un trozo de papel alumnio tapándole, de este modo, dejará de "cocinarse" por arriba.
Siempre os digo, que "juguéis" con el calor del horno, esto es, si véis que ya le queda poco, apagáis el horno y con el calor concentrado acabará de hacerse ... también tenéis que tener en cuenta, que, si ya está no debéis dejarle en el horno por lo mismo, le daréis unos minutos extras de cocción que no nos interesan ... esto es aplicable, no sólo para los bizcochos sino para todo lo demás!!!!.
Pues hasta aquí la receta de hoy, un bizcocho más que interesante, que seguro no os deja indiferentes!!!!!.